Decoración nórdica vintage. De casa a casa con personalidad

Por supuesto. No sólo son compatibles sino que los elementos vintage ayudan mucho a dar personalidad a una decoración nórdica.

Más o menos todos conocemos las características de la decoración escandinava (blanco, maderas claras, colores pastel, funcionalidad).

Lo que pasa es que quizás nos hemos quedado con una imagen estereotipada y  creemos que con tener paredes blancas, muebles de melamina blanca, cojines de colores pastel y cuatro láminas con frases inspiracionales ya tenemos una casa nórdica. De hecho, no hay más que ver algunas de las cuentas que triunfan en Instagram con esta temática.

Mi punto de vista es diferente. No todas las casas escandinavas son iguales, aunque se repiten varios PUNTOS:

-MADERA. no necesariamente clara. Más bien hablaríamos de maderas nobles. Sin tratar o con aspecto de no haber sido tratadas. Además, se recurre a menudo a muebles vintage que son de maderas  oscurecidas por el paso del tiempo.

-TEXTILES. Cojines, mantas, colchas, etc. Se usan tejidos naturales y con cuerpo como el lino con sus fotogénicas arrugas o la cálida lana. Y los colores en cualquier gama que aporte calidez.

El edredón nórdico, como su nombre indica, nació en los paises escandinavos. Además de su función obvia también da esa sensación de cama "voluminosa" que solemos ver en los dormitorios nórdicos.

-SIMPLICIDAD Y FUNCIONALIDAD. Líneas simples y ausencia de artificio. Se huye de la acumulación de objetos. Si tienes varios jarrones no los pongas todos, usas uno y guardas los demás para no dejar demasiados elementos a la vista.

Para introducirlo en casa tienes varias OPCIONES:

-NO MENOSPRECIES LOS MUEBLES HEREDADOS. Dale una oportunidad a la cómoda del abuelo. Aunque no sea estilo McIntosh hay muebles en los que una capa de pintura hace milagros.

Suele pasar también que cuando la gente hereda muebles antiguos (más que vintage) no sepan muy bien qué hacer con ellos, ya que suelen ser grandes y de estilos recargados.

Dale una vuelta antes de venderlos. No digo que te los quedes todos, pero una pieza recargada puede quedar bien, por ejemplo, en una entrada muy sobria.

-MERCADILLOS Y TIENDAS DE SEGUNDA MANO (tipo Rastro Reto). Esto es para auténticos cazadores de reliquias. Hay que tener mucha paciencia para rebuscar entre trastos inservibles y muebles feos pero a veces, con suerte, se encuentran maravillas. Ve más allá y piensa en cómo quedaría esa silla si la retapizas. La creatividad es un plus. 

Por ejemplo, fíjate en lo actual que se ve esta alacena de cocina vintage tras pasar por las manos de María de DrLivinghome.

-LA CALLE. He de reconocer que desde hace unos años es bastante difícil conseguir muebles decentes en la calle. La gente ahora sabe lo que tiene y la llegada de Wallapop  ha hecho que esa silla que antes habrías regalado ahora intentes venderla. Si aún así, la silla acaba en la calle, tendrás que llegar antes que los buscadores de chatarra, que la destrozarán para quedarse con las partes metálicas, así sea una Breuer original.

Si pese a las dificultades encuentras algo decente, enhorabuena. No olvides que las cosas rotas se pueden arreglar.

-WALLAPOP Y TIENDAS DE SEGUNDA MANO ONLINE. Es un poco lo mismo, entre un montón de cosas sin valor puede aparecer una joyita. Y, de nuevo, pensemos más allá cuando miramos esa mesa fea pero tirada de precio. ¿Quizás pintándola?

-TIENDAS ESPECIALIZADAS. Lo más fácil. No hay que esperar y seguramente tendrán justo lo que estás buscando. Y, si no lo tienen, lo buscarán para ti.

Aquí todo depende de tu paciencia o de si buscas algo más o menos concreto. De lo creativo que seas y de tu mentalidad (no todo el mundo está dispuesto a meter en casa muebles de la basura)

De cualquier manera, verás lo que gana tu salón con esa lámpara y tu dormitorio con esa butaca. Añade plantas, libros y tus tesoros. El resultado: de catálogo de tienda de muebles a casa vivida y con personalidad. Te gustará tu casa.